Google está lanzando nuevas funciones que ayudan a los usuarios a reducir sus gastos en la factura de la luz, facilitando automáticamente información sobre la crisis energética en función de las búsquedas realizadas.
De este modo, entre los primeros resultados de consultas relacionadas con la energía realizadas en países de la Unión Europea como España, se muestran recomendaciones para ahorrar energía y secciones sobre la crisis energética europea.
Crisis energética europea
Las secciones sobre la crisis energética europea incluyen un resumen, una sección de noticias y otra de información local.
La sección de resumen muestra una mezcla de las otras dos, incluyendo en primeras posiciones enlaces como crisisenergetica.org, web registrada hace 20 años (octubre de 2003) y que pretende ser un espacio de debate y comunicación sobre recursos energéticos y del problema de la disminución de los recursos combustibles fósiles.
La sección de noticias, como es lógico, incluye información reciente sobre la crisis energética aparecida en medios de comunicación.
Por último, la sección de información local ofrece recursos locales y nacionales sobre la crisis energética y acciones recomendadas por la Agencia Internacional de la Energía para ahorrar energía.
Recursos locales y nacionales
El apartado de Recursos locales y nacionales ofrece Consejos prácticos para ahorrar energía y dinero e información sobre el Bono Social de electricidad facilitada por el Gobierno de España, además de Contexto sobre la crisis energética de la Agencia Internacional de la Energía.
Acciones recomendadas
Acciones recomendadas incluye consejos para ahorrar de la Agencia Internacional de la Energía:
1.- Bajar la calefacción
Si baja el termostato solo 1°C, ahorrará cerca de un 7% en el consumo de energía de la calefacción y conseguirá un recorte en la factura promedio de (entre 50 EUR y 70 EUR) al año.
Coloque el termostato en el nivel más bajo que le resulte cómodo y póngase ropa de abrigo cuando esté en casa.
Use un termostato programable para establecer la temperatura en 15° C mientras duerme y en 10º C cuando no haya nadie en casa. Así recortará hasta un 10% el gasto anual en las facturas de la calefacción.
Pruebe a calentar únicamente la habitación en la que se encuentre o aquellas que utilice con frecuencia.
2.- Ajustar los parámetros de la caldera
Los ajustes de fábrica de las calderas suelen ser más altos de lo necesario. Baje la temperatura del agua caliente para ahorrar un 8% en el consumo de energía de la calefacción y recortar la factura promedio en 100 EUR al año.
Si dispone de una caldera mixta moderna y compleja y no es capaz de hacer el ajuste consultando el manual, tal vez tenga que concertar una única visita del fontanero para que lo haga.
Cambie el baño por la ducha para gastar menos energía en calentar el agua. Y si ya se ducha, acorte el tiempo de duración que dedica a hacerlo.
Las tuberías y las calderas de agua caliente deberían aislarse para que no haya fugas de calor.
Limpie con frecuencia las calderas que funcionen con madera y pellets con un cepillo de cerdas, para que sigan funcionando de forma eficiente.
3.- Aislar para conservar el aire caliente
Cierre las ventanas y las puertas, aísle las tuberías y tape los huecos que rodean ventanas y chimeneas, o de otro tipo, para mantener el aire caliente dentro de casa.
Salvo que su vivienda sea de construcción muy reciente, se perderá calor por las corrientes de aire generadas por puertas y ventanas, rejillas próximas al suelo o por la chimenea. Aísle o selle estos huecos para ahorrar hasta 100 EUR al año.
Instale cortinas o estores tupidos en las ventanas para conservar aún más el calor. Cierre los huecos de las chimeneas (salvo que estén encendidas), para que el aire caliente no salga directamente por el tubo de la chimenea.
Si no utiliza nunca la chimenea, selle el conducto de salida para que no se escape el calor.
4.- Cambiar las bombillas
Sustituya las bombillas antiguas por unas nuevas que sean LED y deje encendidas solo las que necesite.
Las bombillas LED son más eficientes que las bombillas incandescentes y las halógenas, se funden con menos frecuencia y ahorran cerca de 10 EUR al año por bombilla.
Compruebe la clasificación energética cuando compre bombillas y procure decantarse por las de categoría A (la más eficiente) y no por la G (la menos eficiente).
La manera más sencilla de ahorrar energía es apagar las luces al salir de la habitación.
5.- Desplazarse en bici
Caminar o ir en bicicleta son alternativas estupendas al automóvil para los desplazamientos cortos y nos ayudan a ahorrar dinero, reducir las emisiones y disminuir los atascos.
Si puede, deje el coche en casa para los desplazamientos cortos, sobre todo si posee un vehículo de gran tamaño.
Comparta coche con sus vecinos, amigos y compañeros para ahorrar energía y dinero. Si se desplaza en bicicleta, también conseguirá enormes ahorros y beneficios para la salud.
Muchas administraciones ofrecen además incentivos para adquirir bicicletas eléctricas.
6.- Usar el transporte público
Para las distancias más largas, en las que no resulta práctico caminar ni ir en bicicleta, el transporte público también ayuda a reducir el uso de energía, los atascos y la contaminación atmosférica.
Si va a hacer un viaje más largo, piense en dejar el coche en casa y usar el tren.
Compre un abono transporte para ahorrar dinero con el tiempo. Su empresa o su administración local también podrían ofrecer incentivos para adquirir abonos transporte.
Planee sus desplazamientos de antemano para ahorrar en los billetes y encontrar la mejor ruta.
7.- Conducir de forma más inteligente
Optimice su estilo de conducción para reducir el consumo de combustible; conduzca con suavidad y a velocidades más bajas por autopista, cierre las ventanas cuando vaya a gran velocidad y asegúrese de que la presión de los neumáticos sea la correcta.
Procure ir por rutas en las que no haya mucho tráfico y apague el motor cuando no se esté moviendo.
Conduzca 10 km/h más lento en las autopistas para recortar la factura de combustible cerca de 60 EUR al año.
Conducir de manera constante a una velocidad de entre 50 y 90 km/h también puede ahorrar combustible.
Cuando se conduce a más de 80 km/h, es más eficiente usar el aire acondicionado que abrir las ventanas.
Además, debe revisarse el motor periódicamente para mantener la eficiencia energética.